De Navajas... me las como todas porque saben bien majas

Atardecer...

Y el mar en mi mesa. Navajas Gratinadas.

Mi ventana da al Golfo de Trieste, Mar Adriàtico,Italia. A mis espaldas el Carso, un altiplano de roca calcarea que se extiende desde los pies de los Alpes Giulia hasta el noroeste de la Croacia. En estas tierras de vieja dominaciòn austro-hùngara se conjuga como en casi toda Italia, la gastronomia que une el mar y la montaña. Pero sobre la costa, en las mesas, el mar es el protagonista indiscutible. No hay plaza de pueblo que no reciba una vez a la semana una feria con un puesto de venta de pescados incluido. O si no, estan las pescaderias con productos fresquisimos, pescados esa misma noche , con los de estaciòn a precios verdaderamente accesibles. Asi que en casi todos los hogares triestinos, se come pescado varias veces en la semana. Y mi casa no es la excepciòn. Y mis preparaciones... a la italiana!!

Las navajas (ensis ensis) son moluscos que se encuentran ya a un metro en las costas debajo de la arena. Se alimentan de plancton. Las conoci recien acà en Italia. Cuando las vi por primera vez me parecieron super simpàticas y cuando las probè descubri que ademàs son deliciosas!!! Por lo que cada vez que las encuentro no me contengo en comprarlas. Estuve investigando y en la costa atlantica argentina (almeja navaja) como asi tambien en el sur de Chile ( navajuela) existen. A nivel nutricional , las navajas, al igual que otros moluscos bivalvos, contienen muy poca cantidad de grasas (entre el 0,5 y el 2%), aportando menos de 120 calorías por cada 100 gramos de porción comestible. Resultan una fuente modesta de vitaminas del grupo B, A y D. Además destaca por su aporte de minerales como hierro y sodio.Recomiendo que las prueben si tienen la ocasiòn.


Primero las debemos dejar en reposo con agua de mar o en su defecto con sal marina, una media hora para que suelten la arena que tienen dentro.

Luego las abrimos a lo largo, en la parte que se entrevee el animal, pero si despegarlo de su concha.




















Luego le retiramos la pielcita interna e intestinos (que se ven negros).







Las colocamos abiertas en una placa para el horno. Las espolvoreamos de pan rallado y perejil y las roceamos con aceite de oliva. Algunos les colocan tambien ajo picado.

En estos ùltimos tiempos respecto de la preparaciòn de los pescados ,he encontrado opiniones en contra y en favor de usar el ajo como condimento. Algunos opinan que "tapa" el sabor original del pescado sobre todo en el caso de carnes delicadas. A otros, simplemente les gusta màs asi. Yo adoro el ajo, pero en algunas preparaciones prefiero no ponerlo. En general al italiano le gusta comer el pescado lo menos condimentado posible, porque dicen que es asi como se aprecia su sabor. Pero como dice el refràn... sobre gustos...






















Luego no resta que meterlas en horno precalentado a 200º, solo para darle un golpe de calor que gratine la cubierta. Se cocinan muy rapidamente y no deben secarse, de lo contrario quedan duras y pierden todo su encanto.







Acà estàn crocantes pero jugosas, calentitas recièn saliditas del horno y listas para una panzada.





Buon Appetito a Tutti!!